Pavimento rústico, la última novedad para la decoración de tu hogar
El pavimento rústico se utiliza desde tiempos remotos, pero sigue siendo tendencia incluso en las decoraciones más vanguardistas, ¿Qué tienen de especial para no pasar de moda?
En este post te contamos todo sobre el pavimento rústico, razones por las que se sigue utilizando, y también te enseñaremos la gran variedad que ofrece el mercado actual, y como puedes utilizarlos en decoración para todo tipo de espacios.
Contenidos
Razones para revestir los suelos con pavimento rústico
➡Una de las primeras razones por las que el pavimento rústico cuenta con tantos adeptos, es la calidez que genera en los ambientes en los que se instalan suelos del barro cocido o terracota.
Este tipo de suelos resulta ideal para climas fríos, porque actúa como aislante térmico, y retiene el calor, de tal manera que el suelo siempre estará más templado cuando empleas pavimento rústico, en lugar de granito o suelos de mármol que son mucho más fríos.
➡El pavimento rústico de baldosas de terracota, o cerámica, se presenta en un montón de formatos y tipos, lo que permite personalizar mucho la decoración, y es ideal combinado con azulejos vidriados, listones de madera, o mosaicos realizados con cantos rodados.
➡Los suelos rústicos son resistentes, aguantando la fricción y los cambios de temperatura, pero además son fáciles de mantener, y aquellos que presentan un desgaste natural aún pueden aportar mayores cualidades estéticas.
➡El pavimento rústico tiene el encanto y la singularidad de los materiales naturales y aporta estilo y personalidad en cualquier espacio.
➡Pero además si te gusta el efecto campestre pero de apariencia más homogénea para que las juntas queden perfectas, y no tener que dejar llaga entre baldosas, actualmente existen materiales como el pavimento rústico de gres porcelánico, con el que puedes conseguir un aire muy campestre, pero con una terminación mucho más continua y de efecto técnico.
Tipos de pavimentos rústicos
Barro cocido
Este tipo de pavimento rústico resulta muy singular, porque no se fabrica en serie, sino en colecciones de serie limitada trabajadas artesanalmente, que les confiere una cierta falta de homogeneidad que es parte de su encanto.
Su instalación requiere dejar espacio o llaga entre la unión de baldosas precisamente porque las piezas no son totalmente simétricas, y no se pueden juntar totalmente. De esta forma se obtienen esos pavimentos rústicos para interiores, que pueden llevar mayores, o menores separaciones.
Estos suelos rústicos de interior, se pueden encontrar en formatos poligonales, como hexágonos alargados de 5×10, cuadrados de 10 x 10, o de 5×5, entre otras medidas, para jugar con su disposición, y complementar también con piezas vidriadas en tonos verdosos o amarillentos.
Si te gusta el típico pavimento rústico de las masías, barracas o cortijos de nuestro país, esta será tu mejor elección.
Eso sí, aunque el efecto más natural y tosco resulta precioso para todos aquellos que valoran la naturalidad y los aires campestres, sin embargo es mejor tratar estos pavimentos posteriormente, para evitar que su alta porosidad absorba manchas de todo tipo.
Gres rústico
Como ya te hemos comentado más arriba, existen muchos modelos de gres porcelánico que imitan pavimentos típicamente rurales, con una altísima resistencia a la erosión, y rotura frente a los cambios de temperatura y el agua.
Además se trata de pavimentos con muy baja absorbencia de humedad, por lo que no hay que preocuparse de que las piezas se puedan deteriorar con las heladas.
Estas baldosas se pueden colocar sin llaga porque sus aristas son perfectas, pero si deseas generar un aspecto estético más tosco y artesanal, también puedes pedir que te las instalen con cierta separación.
Como las baldosas de barro, el gres porcelánico de aspecto rústico se puede combinar con otros materiales para diferenciar grandes espacios exteriores o simplemente para separar zonas.
Este tipo de pavimento rústico no necesita mantenimiento, y su limpieza es muy sencilla.
✔Puedes encontrar baldosas de gres de imitación madera, con distintas dimensiones para conseguir el mejor efecto de lamas naturales, que son un clásico intemporal, cálido y a la vez elegante en el solado de casas rurales y campestres.
Seguro que ya te estás imaginando como va a quedar en tu salón, pero si quieres ver cómo queda, aquí lo tienes…
✔Entre la amplia variedad de efectos que ofrece el gres porcelánico para casas de aire natural, otra posible elección son las baldosas de pizarra artificial, en las que puedes encontrar todas las texturas y tonalidad de este material natural, pero con una mayor resistencia a la abrasión o fractura, y con la ventaja de ser un material más repelente de las manchas, por lo que su mantenimiento y limpieza será mucho menor.
✔El efecto piedra en formato de baldosa de gres porcelánico, también es otra de las posibilidades que te ofrece el mercado actualmente, y siempre puede resultar más económico que el material original.
✔Para finalizar, no podemos dejar de mencionar los pavimentos rústicos para interiores de las exquisitas colecciones en baldosa hidráulica que están de rabiosa actualidad, y con las cuales se puede jugar para generar todo tipo de espacios.
Jugando con las mil posibilidades plásticas que te ofrecen las baldosas hidráulicas puedes generar desde las más sofisticadas y vanguardistas decoraciones, pasando por ambientes de estilo retro y vintage, hasta generar espacios coloridos, y con una personalidad muy singular, utilizando este tipo de pavimento rústico muy versátil, a la hora de combinar con madera, cemento, o barro cocido.
¿Qué te parece esta maravillosa propuesta?, si te gusta, toma nota y pregúntanos.
Gres catalán
Con este nombre se conoce a un pavimento rústico instalado en los suelos de toda la costa mediterránea, fabricados con tierra cocida y siguiendo las tradiciones ceramistas de Cataluña, por ser la zona que los empezó a producir y comercializar.
Son materiales que además de ser naturales, resultan bastante económicos, y por eso se han utilizado mucho en los revestimientos para terrazas, azoteas, pero además también es muy habitual encontrar alfeizar o poyetes de ventanas revestidos con este material.
La oferta de formatos es muy variada, y se pueden encontrar peldaños para escaleras, piezas terminadas en moldura para ventanas, bordes de piscina, y por supuesto para suelos en distintas medidas y formas hexagonal u octogonal.
En cuanto al colorido tradicional de este tipo de pavimentos rústicos, varía entre tonalidades más arcillosas y rojizas, pasando por tonos de cuero, y más claras.
Como las baldosas de barro, y las de gres porcelánico de estilo rural, pueden perfectamente ser combinadas con otros materiales como madera, cemento, piedra en bruto, canto rodado, y un sinfín de posibilidades más.
Con este tipo de material puedes conseguir ambientes de gran personalidad y súper acogedores, sin que te duela demasiado el bolsillo.
Piedra natural
La piedra natural es un pavimento rústico por excelencia, utilizado más habitualmente para exteriores, pero que también es muy fácil verlo en pavimentos de construcción tradicional de tipo fortaleza, religioso como conventos, iglesias, y en mansiones y quintas de recreo.
Los suelos compuestos por bloques de gran tamaño de granito sin pulir, son un clásico sobre todo en la zona norte de nuestro país.
El inconveniente principal es su precio, que al ser un material natural es más escaso y costoso.
Otro problema de estos pavimentos rústicos para interiores, es su alta absorción ante las manchas, que hace más difícil su mantenimiento, porque evidentemente se trata de instalar piedra sin pulir, para conseguir un efecto genuino, por lo que además las irregularidades del relieve también dificultan su limpieza.
¿Pero te imaginas como queda una gran estancia con los suelos de piedra, altos techos, una enorme chimenea y piezas de piel natural sobre el suelo?
Madera natural
Siempre desprende la sensación de lo auténtico, decapada, barnizada con brillo o mate, imprime categoría incluso en los espacios más humildes, porque hablamos de un pavimento rústico de origen natural.
Los suelos de madera, como hemos visto se puede emplear solos o combinados con piedra, barro, pizarra, cemento, baldosa hidráulica, y un sinfín de posibilidades, para conseguir espacios muy armoniosos y especiales, aportando siempre el perfecto toque de calidez.
Los mayores inconvenientes de estos suelos rústicos de interior, son sus precios, y que se trata de materiales más delicados frente a la abrasión, y la humedad por lo que necesitan un mayor, y mejor mantenimiento.
Por si te animas, aquí te dejamos una estupenda propuesta con suelo de madera.
Pero si te decides por alguno de los tipos de pavimento rústicos como los greses porcelánicos de efecto rural, baldosas hidráulicas, o efecto barro y madera, no dejes de ponerte en contacto con nosotros para resolver cualquiera de tus dudas.