¿Por qué cambiar la bañera por un plato de ducha?

El cuarto de baño es una de las estancias que más se suelen reformar ya que es una de las que más se desgastan y estropean a lo largo del tiempo. La reforma integral del baño requiere una cierta inversión, pero mejorar esta estancia suele ser una necesidad para muchos inquilinos, sobre todo cuando el piso o la casa en cuestión tiene más de 30 años de vida. Y una de las peticiones que más nos suelen hacer los clientes en Ambiente Cálido es cambiar la bañera por el plato de ducha.

Las reformas en una vivienda sueñen ser temidas por los inquilinos debido al tiempo de duración y el gasto total de ellas. No obstante, hay muchos motivos por los que cambiar la bañera por el plato de ducha. Así, en este artículo te contamos todos los pasos y los beneficios de hacer esta reforma en casa.

Motivos para cambiar la bañera por un plato de ducha

Es verdad que darse un baño al llegar a casa cansado del trabajo, después de un largo viaje o día de deporte o incluso por puro placer es una actividad muy relajante y que a muchas personas les encanta hacer. Sin embargo, cada vez más inquilinos eligen la ducha por encima de la bañera por un sinfín de motivos.

La ducha es más segura que la bañera

Uno de los accidentes domésticos más comunes es caerse al entrar o dentro de la bañera. Esto ocurre sobre todo para personas con dificultad de movilidad o gente mayor. Los platos de ducha actuales son más seguros en este sentido ya que no suponen ningún problema para entrar en ellos. Al cambiar la bañera por un plato de ducha se emplean productos especializados, como materiales antideslizantes.

Con la ducha se ahorra más agua que la bañera

Es lógico pensar que para ahorrar es mucho mejor ducharse que bañarse. En cifras generalizadas, se necesitan 100 litros de agua para una ducha y 250 litros para un baño. No obstante, dependiendo de la bañera se puede llegar a gastar el agua de hasta 10 duchas.

El coste medio del agua potable en las viviendas es de 1,59 euros cada mil litros, según el último estudio presentado por la Asociación Española de Abastecimientos de Agua y Saneamiento (AEAS). Es una cantidad que puede parecer pequeña, pero también hay que contar con el gasto del gas al llenar una bañera con agua templada o caliente.

Ecoducha: Respeto hacia el medio ambiente

En los últimos años hemos visto una preocupación creciente ante la escasez de agua. Campañas de sensibilización a favor del medio ambiente nos lo recuerdan cada día. Es importante ser respetuoso con el medio ambiente y el agua es un bien escaso. Es necesario controlar entre todo el gasto innecesario de este bien. No es nada lógico llenar la bañera hasta arriba todos los días. Además, las últimas tendencias en duchas se está buscando la forma de evitar el malgasto de agua y ahorrar tanto en cantidad de agua como en tiempo de calentamiento de ésta.

Una ducha ahorra espacio en el baño

A cualquier persona del mundo le gustaría poder tener en su propio hogar un cuarto de baño amplio, sin problema de espacio y en el que sea cómodo estar. A la hora de diseñar y construir una casa, se tiende a quitar espacio del cuarto de baño para dárselo a otra de las habitaciones principales. Y aunque esto ocurre sobre todo en las viviendas más antiguas, los pisos de reciente construcción también cumplen esta tendencia. El problema de que el baño sea la estancia con menor repartición de espacio es que en pocas viviendas pueden estar dos personas en el baño.

Uno de los principales motivos por los que se suele hacer una reforma en el cuarto de baño es para ahorrar espacio y hacer que parezca mucho más grande de lo que realmente es. Y la bañera suele ser uno de los principales causantes de este problema. Por eso, al cambiar la bañera por un plato de ducha ganarás mucho más espacio.

Mejora la higiene de tu cuarto de baño

Ducharse siempre va a ser más higiénico que bañarse. La bacteria Pseudomonas Aeruginosa tiene como medio natural el agua y puede quedarse en nuestra bañera a pesar de que el cloro suele eliminarla parcialmente. Además, los cambios de PH del agua por los productos corporales pueden favorecerla. Esta bacteria puede refugiarse en el oído o en la vagina provocando erupciones cutáneas e infecciones. La bañera también es un foco de infecciones provocadas por hongos.

La ducha es más fácil de limpiar

Siguiendo el argumento comenzado en el punto anterior, la ducha implica una limpieza mucho más sencilla y menos intensa. Para poder utilizar la bañera es muy recomendable y necesario llevar a cabo una limpieza en profundidad. Sin embargo, los platos de ducha son muy cómodos de limpiar gracias a que suelen incluir materiales antiibacterias y antimoho.

Una ducha es más cómoda que una bañera

La supresión de las barreras arquitectónicas es una de las mayores ventajas que conseguirás al poner un plato de ducha. Cuando se trata de una vivienda con personas mayores o personas con movilidad reducida se recomienda cambiar la bañera por un plato de ducha para que ellos tengan mayor independencia y autonomía personal.

Las tendencias de diseño apuntan a la ducha

En el último año hemos visto como una de las tendencias de diseño de interiores más apoyada es la de la funcionalidad del mobiliario. Se buscan espacios amplios con menos muebles y que cumplan su función. Es inevitable que pienses que una bañera puede ser un elemento estético imprescindible en tu cuarto de baño. Lo aceptamos siempre y cuando el baño sea lo suficientemente grande como para que la bañera no esté encajonada entre tres paredes.

De hecho, cambiar la bañera a un plato de ducha revalorizará tu piso considerablemente. Las empresas de diseño de duchas están incorporando nuevas funcionalidades que marcan la salida de agua y el estilo de masaje.

Cómo elegir: diferentes tipos y estilos de ducha

Como hemos visto cambiar la bañera por un plato de ducha o una ducha de obra es la última tendencia en reformas y diseño de interiores. Pero… ¿qué ducha es la más adecuada para tu cuarto de baño? Podemos diferenciar la estructura de una ducha en: plato de ducha, grifería y mamparas.

Tipos de platos de duchas

El plato de ducha es la losa que se instala en el suelo del cuarto de baño. Ésta actúa como aislante contra las filtraciones del agua y la conduce al desagüe. Puede estar fabricado en distintos materiales como cerámica, acrílico, carga mineral o piedra natural. Estos son los más comunes:

  • Platos de ducha de STONEX: Es un material resistente y de larga duración que tiene una propiedad antideslizante perfecta. Puede tener un acabado de textura de madera en diferentes colores. Ofrece la posibilidad de corte a medida. Suelen ser extraplanos por lo que se integran directamente en el suelo.
  • Platos de ducha acrílicos: El diseño de plato de ducha más tradicional. Suelen tener un diseño sencillo, adaptable y neutro. Pueden incorporar un sistema antideslizante.
  • Platos de ducha de acero: Los platos de ducha de acero garantizan una perfecta integración en el espacio de la ducha y no implican una segunda altura ya que pueden tener solamente 3,5 milímetros de grosor. Opcionalmente se puede añadir un fondo antideslizante.
  • Platos de ducha de porcelana: La porcelana es el material más económico para los platos de ducha. Se suele combinar con tarimas en otros materiales para darle un toque de diseño. También se puede incorporar una opción antideslizante.

A su vez, el plato de ducha puede tener diferentes formas:

  • Platos de ducha rectangulares: están recomendados para los cuartos de baños más espaciosos. Al menos que superen los 3,5 metros cuadrados.
  • Platos de ducha cuadrados: Los platos de ducha cuadrados están recomendados para espacios de menos de 3,5 metros cuadrados.
  • Platos de ducha angulares: estos platos de ducha ganan espacio al poder colocarse en una de las esquinas del baño. También son adecuados en espacios menores a 3,5 metros cuadrados.
  • Sistemas In-Drain: Lo último en platos de duchas. Es un nuevo concepto de ducha integrada que apuesta por la funcionalidad de los elementos. Un sistema In-Drain se adapta a cualquier estilo de suelo de baño sin necesidad de tener un plato de ducha como tal.

Tipos de grifería para la ducha

Otro de los elementos que ha evolucionado a lo largo del tiempo es la grifería que se puede instalar en la ducha.

  • Grifos bimandos: Esta grifería se caracteriza por contar con dos mandos cada uno con su función. Uno de ellos controlará el caudal de agua y el otro controlará la temperatura.
  • Grifos termostáticos: La grifería termostática ahorra agua y energía gracias a su instalación aportando seguridad y confort. Un grifo termostático permite regular de antemano la temperatura para evitar cambios de temperatura bruscos. Estos grifos permiten un consumo más responsable del agua.
  • Columnas de ducha: Las columnas de ducha son funcionales y permiten mejorar la experiencia de la persona. También pueden encontrarse columnas de ducha con hidromasaje, un concepto que está ganando terreno e interesa mucho al cambiar la bañera por plato de ducha. Suelen tener jets integrados, ser termostáticas e incluir la ducha de mano.
  • Rociadores de ducha: Otro de los conceptos que más está ganando terreno en las reformas de baño. Los rociadores se colocan de forma fija en la parte alta de la ducha y suelen proporcionar el agua en diferentes estilos y formas. Abundante agua en cascada; lluvia chispeante; chorro de agua fusionado con aire dando lugar a voluminosas gotitas de agua; efecto de lluvia tropical, nebulizador o incluso con luces led de distintos colores.

Tipos de mampara para duchas

Por último, otra de las variables que elegir a la hora de cambiar la bañera por un plato de ducha es la mampara que vayas a colocar. Podrás elegir entre:

  • Puertas correderas: La mampara se desliza sobre unas guías. Las puertas correderas no restan espacio al baño y no necesitan ángulo de apertura. Son la mejor opción si tienes un cuarto pequeño de pocos metros cuadrados.
  • Puertas batientes: Las mamparas para ducha batientes suelen abrirse o hacia dentro o hacia fuera de la ducha e incluso en ambos sentidos. Aunque su estética es más minimalista y atrayente ya que no necesita casi perfiles, no son recomendadas en cuartos de baño pequeños ya que come mucho espacio.
  • Paneles fijos: Los paneles fijos suelen ser transparente y son una opción perfecta para espacios pequeños, pero requieren contar con un plato de ducha rectangular, garantizando espacio para entrar a la ducha.

Cambiar la bañera por un plato de ducha es rápido, ¿te animas?

En definitiva, cambiar la bañera por un plato de ducha es un proceso de reforma que no implica mucho tiempo comparado con otras mejoras que se pueden llevar a cabo en el cuarto de baño. Así, aunque se requiera una inversión considerable, al instalar una ducha en el baño se consigue ahorrar dinero y tiempo por lo que merece la pena.

Si estás pensando en cambiar tu bañera por un plato de ducha, puedes contactar con Ambiente Cálido sin ningún tipo de compromiso y te ofreceremos un presupuesto detallado para la reforma de tu cuarto de baño.

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